El aliento dejo de ser el mismo de ayer, su esencia
ligeramente había cambiado, sin explicación más que el sentir de su
respiración, pudo percatarse que el cambio ya estaba hecho, que las notas de la
canción solo le repetían lo que ya sabía, y no era un lamento lo que podía
distinguirse en cada nota, todo lo contrario; había comenzado a disfrutar, a
sentir el ritmo como las pisada, como con la respiración para ofrecer una nota
más afinada con ese falsete que lo caracterizaba, así descubrió que de su voz
podían surgir pasos rítmicos que interpretarían la melodía en baile
liberador...
Y así volvió a cantar, volvió a sentir la melodía a cada
momento del día; mientras se bañaba, corría, leía., en cada gota de agua sentía
de nuevo, a cada respiración forzada y en cada historia escuchaba como en
tercera voz la melodía, la melodía liberadora...
Volvió a estirar sus brazos como antes, como antes de
conocer la opresión, volvió a gritar con la lluvia, revivió el placer de la
adrenalina al conducir a máxima velocidad...
Recordó que es olvidar un dolor de músculos para seguir
hacia adelante, levantarse de la silla por un vaso de agua aunque sus piernas
estuvieran torcidas, levantarse del sillón y tomar el micrófono para cantar con
potencia su canción favorita sin importar los vecinos...
Ahora supo que hay mucho por contar, por revivir, faltan
muchas horas sol, muchos cayos que están esperando a salir, muchas canciones
por conocer, que el día de hoy es solo el inicio...