Era una imagen honesta, brillante, con una mezcla inigualable de color, poseía luz propia, elegancia, formas simétricas que colindaban con la proporción Áurea, en pocas palabras era una imagen perfecta y adorable, la cual solo tenia un defecto, defecto amplio al considerar que es una imagen y que por su naturaleza es su propia necesidad, nadie la miraba, y la belleza solo hace feliz a quien puede poseerla. La imagen tenia perdida su mirada de estar tan abrumada de su color propio, demasiado color y poca admiración, en muchos y largos intentos fallo en tratar de sentirse especial nuevamente, repasaba cada día sus formas sin volverlas a encontrar como la primera vez, lo días y los años pasaban y no perdonan, castigan con polvo, humedad y arrugas, y sobre todo si no hay nadie que se preocupe en mantener con vida, o sin el calor humano que da aliento de vida a los objetos, sujetándolos para que no perezcan y sigan brillando con luz propia. A falta de este estimulo la imagen comenzó a dejarse vencer por los días y los años, difumino a la imagen con una película de polvo que se tradujo en un estado de ceguera inconciente a la imagen. Perdida de conciencia, falta de memoria, estado vegetal, en que toda vivencia previa o conocimiento propio se suspende en el aire. Uno de esos tantos días de polvo, un hombre joven descubrió la película de polvo
*****Metamorfosis exitosa, VerSiön 3.0.M. Mujer de larga cabellera en un paraíso artificial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario