... la hora se acerca ya, toma su bicicleta y retoma el paso.



sábado, 25 de febrero de 2012

Una canción para ti

Le cante una canción la otra noche, aquella noche que comenzó con algazara en la plaza y terminó en lúgubre silencio. Me acompañaban dos coristas, guitarrista y técnico, después de la canción esperé una sonrisa a cambio, la canción tal vez no fue de su agrado, se paró de su silla y se alejó de mi vista, el coro y yo esperamos un momento a que volviera para la segunda tocada, el guitarrista mientras afinó, yo me entretuve con un par de tragos. El técnico alzó la voz con enfado argumentando que no gastaría sus fuerzas esperando a que volviera, no lo detuve, el guitarrista fue el siguiente tras darme palabras de aliento - Te ha dejado tirado, dijo con decepción. Las coristas ni adiós dijeron. Quede ahí sólo mientras la plaza se vaciaba, pensando si le habría gustado la canción y sufrí pensando en su huída, tal vez fue mi voz, o mejor dicho fue culpa del guitarrista quien falló un par de notas, quedé esperando un momento más no sin antes seguir argumentando y dando indulgencias por su escape, autoconvenciendome que si me quería pero que tal vez surgió una urgencia, convenciéndome y justificándolo, amoldando su forma en mi mente, se fue tal vez porque se aburrió o tal vez, tal vez. Guarde el micrófono mirando a cada instante el celular ¿marcara? ¿Se habrá molestado?, miré el reloj nuevamente y era más tarde de lo que imagine aunque eso ya no importaba, lo mejor fue ir a casa a dormir y no pensar más en el asunto

No hay comentarios:

Publicar un comentario